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viernes, 30 de septiembre de 2011

Cantes de compás- 4ª parte


GRUPO I: cantes flamencos primitivos y básicos y sus derivados. "Cantes de compás"- 4ª parte


Tangos 
1.Tangos de Cádiz  
2.Tanguillo de Cádiz  
3.Tientos 
4.Tangos de Frijones (Jerez)  
5.Tangos de Triana  
6.Tangos de Pastora 
7.Tangos de Rosalía de Triana 
8.Tangos de Granada 
9.Tangos de Málaga 
10Tangos del Piyayo  
11Tangos de la Repompa  
12.Tanguillo extremeño 
13.Tangos extremeños 
14.Tientos extremeños 
15.Jaleo por tangos extremeños  
16.Tango-rumba extremeña 
17.Tangos del alba de F. Lara

Tangos
Tangos de Cádiz
1. “¡Arriba esas palmas por tangos!, dice la joven y bella gitana que inunda la estancia con su atractiva presencia y sensual forma de mover su cuerpo bailando por tangos. Las voces jaleantes, el cante y el vibrar de la guitarra acompañan su baile. Hasta el aire parece querer sonar con el batir de sus brazos y el agitado contorneo de su cuerpo”.

El escenario natural de los tangos flamencos (común para la variada gama de estilos nacidos de este animado, alegre y contagioso ritmo) se dibuja a partir de un nutrido grupo de personas sentadas que jalean a una bailaora. Esta, en el centro del corro, contornea sus caderas con la danza sensual de los tangos.

La palabra “tango” nace del verbo tangir y del latín tangere, cuyo primitivo sentido es el de danza para bailar o hacer sonar algún instrumento musical.

Es un cante gitano y está considerado uno de los cuatro pilares básicos del flamenco de compás. Son muy diversas las variantes locales o provinciales de los tangos flamencos, y también los estilos surgidos por creación artístico-personal partiendo de su compás básico. El barrio de Triana (Sevilla), Cádiz y los Puertos, Jerez, Málaga, Granada y Badajoz,
son sus principales centros cultivadores.

Aunque la guitarra sea el instrumento que más se utilice para su acompañamiento, el ritmo de los tangos permite cualquier tipo de instrumentación: guitarras, palmas y jaleos.

En el baile por tangos la vestimenta pintoresca y airosa que lucen los bailaores bailando goza de gran atractivo por su gracia y sensualidad.

El ritmo es binario. Uno de los esquemas típicos para acompañar con las palmas es el siguiente:



2. Tanguillo de Cádiz
“Desde la muralla se observa la marcha de las cuádrigas hacia Roma. El Imperio está en decadencia y les obliga a dejar tras de sí las muy celebradas y extendidas fiestas de palacio, donde las “poulebes” o danzarinas gaditanas -con su especial sensualidad- hacen sus delicias provocando fascinación.
Tras su partida, nativos gaditanos de ambos sexos cantan animados tanguillos, mientras escarban con palas y cubos en la arena de la playa de Gades. Buscan las monedas de oro y plata que los romanos arrojan como augurio de buena suerte para su larga travesía marítima hasta Roma”.

Se llamaba “tanguillo” a una especie de peonza que se hacía bailar con un látigo. Puede que este juego fuese el origen del cante, ya que tienen mucho en común, pues el tanguillo es juguetón e intrascendente. Lo mismo en baile que en cante, es animado y alegre, inspirado en ambientes festeros, y expresa en sus letras chuflas, pasatiempos y toda clase de diversiones. Su patria chica es Cádiz, y se extendió por toda la baja Andalucía en el siglo XIX. Más tarde, a lo largo del siglo XX acaba siendo uno de los cantes más populares y divulgados por toda nuestra península.
No se reconocen maestros de este cante porque ha sido tan popular que todo el mundo lo cantó.

Etimológicamente procede de “tango”, baile y cante. En Andalucía se denomina así a la peonza que se hace bailar. Es el cante propio de la ciudad y provincia a las que representa. En compás acelerado de tango.

Aunque en su composición métrica están muy presentes las cuartetas octosilábicas, goza de cierta libertad y usa versos de distinta medida, siempre que se adapten a su compás.

La base primordial de su temática son letras desenfadadas, irónicas y festeras de diversión intrascendente.


3. Tientos
“La severa estampa de una mujer enlutada lleva a la cadera un cántaro de barro desde la fuente pública hasta su casa, en el barrio “La Viña” de Cádiz.
Sentado a la puerta de su casa, en una silla de anea, un gitano que teje cestos de mimbre le dedica una copla por tientos, con una letra que desgarra el alma por su intencionalidad y profundo sentimiento.
Se escucha el correr de los postigos en las casas circundantes. Sigilosamente asoman sus cabezas cubiertas con negros pañuelos las vecinas interesadas en saber qué “se cuece” allí fuera”. 

Son los tientos uno de los temas del flamenco más popularizados por toda la geografía española por ser una de las melodías más pegadizas del cante. Desde su más antiguo creador, Diego “El Marrurro”, hasta la genial cultivadora “Niña de los Peines”, que los selló con su arte inconfundible, los nombres de Enrique “El Mellizo”, Manuel Torre y Tomás Pavón, se significaron en el bien cantar por tientos. Los tientos, con ritmo más lento que los tangos, pierden su aire alegre porque a éstos siempre los envuelve la tristeza en el cantar. No en vano los tientos son la media naranja amarga de los tangos, que cambian del amor al desamor.

Del latín temptare. 
En baile, los tientos se ejecutan según el compás del que canta, con un aire más lento que los tangos flamencos, de los que se originan y que en la mayoría de los casos les sirven de cierre.

Las letras de los tientos constan de tres versos de ocho sílabas. Expresan temas patéticos y sentimentales un tanto conmovedores.


4. Tangos de Frijones (Jerez)
 Curro frijones, nombre artístico de Francisco Antonio Vargas. Jerez de la Frontera (Cádiz), siglo XIX-Sevilla, siglo XX. Creador de soleares, siguiriyas y tangos.

Con reposo rítmico los “tangos de Frijones” gozan de su acento personal y peculiar melodía. Esencia que recibieron los padres de la Niña de los Peines cuando le acogieron en su casa donde vivió hasta el día de su muerte.

Contaba Antonio Mairena: Curro “Frijones” fue un bohemio, pero su cante tenía una belleza musical llena de sabor flamenco que calaba hondamente en el buen aficionado. Era una gotita de perfume sin parecido con nadie, de un matiz tan especial y gustoso, que propició la creación de otras esencias del cante.

Pastora Pavón o Aurelio Sellés, coinciden en que la versatilidad fue la característica de este gran maestro jerezano.


5. Tangos de Triana
Puente de TrianaSe tiene a los “tangos” por ser uno de los estilos más antiguos del cante. Cádiz y Sevilla se disputaron siempre la originalidad y nacimiento de los tangos flamencos. Por muy lejos que busquemos en la historia en el barrio de Triana se cantaron y bailaron tangos. La tradición oral gitana así lo confirma.
EL ritmo de los “tangos” es muy marcado y pegadizo, y está lleno de improvisaciones personales, admitiendo infinidad de posturas, sin embargo para quien tenga una cierta facultad le será fácil bailarlo.


6. Tangos de Pastora
Pastora Pavón “Niña de los Peines”.Los Tangos de Pastora son una rica variante de este ritmo básico del flamenco que tanta diversidad permite en su compás binario.
Para entender la musicalidad de los “tangos de Pastora” hay que conocer la personalidad de la maestra del cante que los creó: Pastora Pavón “Niña de los Peines”. 

Pastora Pavón nace en Sevilla, una de las cunas más serias e importantes del flamenco, con el germen y sello inconfundible de una de las más reconocidas familias gitanas en este dificil arte.

Su hermano Tomás Pavón es uno de los referentes más fidedignos en el que los nuevos cantaores buscan con frecuencia las verdaderas esencias y raíces flamencas.- Pastora recibe esa herencia de ancestrales sentimientos y vivencias y la trasmite con tal genialidad que le otorgan el rango de autora en numerosos estilos de su dominio-.

Su unión matrimonial y artística con el cantaor-poeta Pepe Pinto, no solo le proporcionan estabilidad emocional hasta el final de sus días, sino que le ofrecen el complemento ideal donde muchas veces apoyarse e inspirarse, para cantar bellas letras que calaron hondamente en los aficionados de su época y siguieron atrayendo hasta hoy a varias generaciones.



7. Tangos de Rosalía de Triana
La ReRosalía Ortiz Agudo, conocida artísticamente como Rosalía de Triana, nació en Sevilla en los primeros años del siglo XX, donde murió en 1973. Dio sus primeros pasos como cantaora profesional en los cafés cantantes sevillanos Novedades y Kursal. Más tarde fuera de su tierra logró gran éxito en los colmaos Villa Rosa de Barcelona y Madrid.

Rosalía de Triana destacó por tonás, tangos, soleares y bulerías. Excelente profesional que supo poner sello propio a este peculiar estilo que como “tangos de Rosalía de Triana” conocemos.


8. Tangos de Granada
En el Sacromonte granadino felizmente conviven, los tangos flamencos de Granada, junto a los numerosos cantes y bailes folklóricos que allí crearon los gitanos.

El baile de la novia, que se hace para representar el casamiento de una gitana con participación de muchas mujeres, acompañadas por músicos.

El fandango, que bailan cuatro mujeres con acompañamiento de coro. La cachucha, representativa del perdón que el gitano pide por haber robado a su novia. El baile de la azucena, que con castañuelas y coro danzan dos gitanillas. El bolero gitano, bailado por una sola mujer a quien acompaña el coro con castañuelas y abundante griterío. Los merengazos, que baila una mujer en solitario. Las sevillanas, bailadas por dos mujeres y dos hombres. La jota gitana, que acompañada por un pandero bailan cuatro mujeres y un hombre. Las granadinas, que acompañadas por guitarra cantan coplas tristes.

La sangre gitana, que se acompaña con guitarras, bandurrias y castañuelas. Y la zambra, que especialmente en el cante tiene mayores  valores flamencos, como se puede constatar por los estilos sellados por Manolo Caracol, Juan Varea, La Paquera, etc.

“Los tangos de Granada” llenos del sabor flamenco que los gitanos del Sacromonte le imprimieran, si bien no tienen en su nómina a significados maestros, con la excepción de “La Repompa” han ido alcanzando gran popularidad con el tiempo, por ser uno de los estilos más cantados para bailar en los ballet y cuadros flamencos.



9. Tangos de Málaga
Los tangos de Málaga tienen su propia fisonomía. Tal vez algo deba influir el hecho de ser del Mediterráneo, pues no en vano los cantes malagueños son diferentes y en general gozan de una especial dulzura melódica.

Las letras de los “tangos” admiten toda suerte de expresiones poéticas desde el humor hasta los sentimientos más emotivos. En cuanto a su interpretación, son muy acusadas las diferencias, siendo este un palo del flamenco en constante evolución que sigue originando nuevos estilos o melodías dentro de su común compás, aunque con notables diferencias en su acelerado o pausado ritmo, y también, en sus ornamentos, acentuación y giros melódicos.

Los tangos de Málaga son generalmente descriptivos de de hechos cotidianos y geográficos.


10. Tangos del Piyayo
El PiyayoManuel Reyes Flores “El Piyayo” tuvo amplia trayectoria personal y flamenca: viajero incesante, desde su Málaga natal cruzó varias veces el charco hacia Melilla. Caminó por toda la baja Andalucía animando con su cante y guitarra las ferias, fiestas y reuniones en todos sus pueblos. Y por si fuera poco para su época, como si la geografía andaluza se le quedara
pequeña, viajó a Cuba donde llevó su música y cante malagueño.

No debe extrañar que sus “tangos flamencos” estén tan llenos de reminiscencias de estilos tales como la “guajira” y otros sones antillanos, mezclados con la primitiva “toná-carcelera.”

Es de justicia decir que los “Tangos del Piyayo” gozan de giros melódicos inusuales en otros estilos de su grupo. Lo que en su día supuso una importante innovación para el mundo del flamenco.

A la interpretación publica y discográfica de cantaores de prestigio debemos el que tan peculiar forma de cantar por “tangos” esté latente en nuestros días. Quedando así, registrados y reconocidos los “Tangos del Piyayo” como un apreciado estilo de nuestro cante.

El Piyayo


¿Tu conoces al ”Piyayo”
un viejecillo renegro, reseco y chicuelo;
la mirada de gallo
pendenciero
y hocico de raposo
tiñoso...
que pide limosna por "tangos"
y maldice cantando "fandangos"
gangosos?

¡A chufla lo toma la gente
y a mi me da pena
y me causa un respeto imponente!

Ata a su cuerpo una guitarra,
Que chilla como una corneja
Y zumba como una chicharra
Y tiene arrumacos de vieja
Pelleja.


Yo le he visto cantando,
Babeando
De rabia y de vino,
Bailando
Con saltos felinos
Tocando a zarpazos,.

Los acordes de un viejo"tangazo"
Y, a sus contorsiones de ardilla,
Hace son con la sucia calderilla.

¡ a chufla lo toma la gente
y a mi me da pena
y me causa un respeto imponente!

Es su extraño arte
su cepo y su cruz,
su vida y su luz,
su tabaco y su aguardientillo...
y su pan y el de sus nietecillos:
"churumbeles" con greñas de alambre
y panzas de sapos.


Que aullan de hambre
Tiritando bajo los harapos;
Sin madre que lave su roña;
Sin padre que "afane"

Porque pena una muerte en santoña;
Sin mas sombra que la del abuelo...
¡poca sombra, porque es tan chicuelo;
en el altozano
tiene un cuchitril
¡a las vigas alcanza la mano;
y por lumbre y por luz, un candil.

Vacia sus alforjas
Que son sus bolsillos,
Bostezando los siete chiquillos,
Se agrupan riendo.


Y entre carantoñas les va repartiendo
Pan y pescao frito,
Con la parsimonia de un antiguo rito:
¡chavales!
¡pan de flor de harina!
Mascarlo despasio.

Mejo pan no se come en palasio.
Y este pescaito, ¡no es na?
¡sacao uno a uno del fondo del má!
¡gloria pura él!
Las espinas se comen tamié,
Que to es alimento...

Asi....despasito.
¡no llores, Manuela!
Tu no pués, porque no tiés muelas.
¡es tan chiquitita
mi niña bonita!..
así, despasito.

Muy remascaito,
Migaja a migaja, que dure,
Le van dando fin
A los cinco reales que costo el festín.
Luego entre guiñapos durmiendo,
Por matar el frío, muy apiñaditos.

La Virgen María contempla al “Piyayo”
Riendo
Y hay un Angel rubio que besa la frente
De cada gitano chiquito.

¡A chufla lo toma la gente!...
¡y a mi me da pena
y me causa un respeto imponente!


11. Tangos de la Repompa
Enriqueta de la Santísima Trinidad de Los Reyes Porras 'la Repompa de Málaga'Enriqueta Reyes Porras, conocida artísticamente como “La Repompa”, nació en Málaga en 1937, donde murió en edad muy temprana a causa de una peritonitis en 1959.
Era todavía una niña cuando empezó a ganarse la vida cantando en las tabernas de los barrios malagueños El perchel y la Trinidad.
Seguidamente pasó a formar parte del cuadro flamenco Los Vargas. Sus brillantes actuaciones en el tablao flamenco El Refugio de Málaga le valieron una bien ganada fama para ser contratada por el Casino de la Exposición de Sevilla, y desde allí seguir una carrera corta pero meteórica por distintas ciudades de España.
Tuvo “La Repompa” el honor de cantarle a la genial maestra del baile Pastora Imperio en los tablaos flamencos El Duende de Madrid y de San Sebastián, y de formar parte una temporada del elenco artístico del tablao madrileño El Corral de la Morería.
“La Repompa” grabó en discos “tientos”, “bulerías” y “tangos” entre otros estilos, dejando para los buenos aficionados una recreación de los “tangos de la Pirula” de Málaga, que le otorgan el reconocimiento de maestra del cante. Pues su estilo ha creado escuela con el nombre de “tangos de La Repompa.


12. Tanguillo extremeño
Goza Extremadura de ser una de las regiones de España con mayor número de estilos folkóricos y flamencos. Mientras que la provincia de Cáceres se caracteriza por su apasionada entrega al cultivo del folklore, la de Badajoz, desde siempre tuvo una clara vocación por el flamenco. Ello no impide que en ambas gusten y se practiquen indistintamente estas manifestaciones artísticas y culturales.

Distinto de la “jota-redoble” cacereña o de la pacense “jota del candil”, el “tanguillo extremeño” con aire flamenco pero de fácil interpretación, se canta con cierto desenfado y jocosidad. Su animado ritmo invita a la participación colectiva en cualquier reunión festiva.


13. Tangos extremeños
Son las fiestas de San Juan en Mérida y va a dar comienzo el más importante encuentro de gitanos de toda la Península Ibérica, donde acuden familias enteras para conocerse entre ellas.El cuadrado que circunda la Plaza de España se puebla de caballos de monta atados a los palos.
Los solteros más jóvenes intercambian miradas y sonrisas. Otros, los que en anterior ocasión se conocieron, sellan su compromiso de boda. Desborda el ambiente la alegría y suenan guitarras con ritmo de tangos extremeños. Cantan los gitanos, y las gitanas bailan rodeadas en círculo entre “olés” y compases de palmas de familiares y amigos.

Si al hablar de tangos flamencos, que son uno de los cuatro pilares fundamentales de nuestro cante, queremos hallar variedades melódicas, hay que resaltar las que nos ofrecen los “tangos extremeños”. En la tierra extremeña, y muy especialmente en las riberas del río Guadiana, en la provincia de Badajoz, donde el ambiente gitano le era propicio, se
aclimataron ciertos cantes (entre ellos, los tangos), que habrían de tomar con el tiempo su propio carácter con especial atractivo. Así, el sentir gitano de Porrina de Badajoz, Juan Cantero, “La Marelu”, El Moro y el de los cantaores payos Felipe Lara, Domingo Rodríguez, El Niño de la Ribera, y otros cantaores de la tierra, encontraron un nuevo vehículo para
expresarse.
Tangos extremeños: del latín tangere y tangir. Se refiere al ruido resonante del tañido de tambor o a los sonidos que producen otros instrumentos al ser percutidos. El gentilicio hace referencia a la región a la que representan


Es un estilo de tangos con el particular deje del lenguaje y cadencia musical del pueblo extremeño, que les otorga un especial atractivo. Sus composiciones literarias siguen la característica común de todas las variantes existentes de tangos, lo más destacable son las letras desenfadadas, festeras y de amor.

14. Tientos extremeños
Andar con cautela poniendo pies sobre seguro. También, colocar una cosa en sitio o lugar firme. Algo así ocurre cuando la bailaora ejecuta la danza de los “tientos flamencos”, su temple, su solemnidad y su marcado compás, dan a entender con qué sentido de la firmeza y seguridad mueve su cuerpo y pies, poniendo sus cinco sentidos en la consumación artística de su baile.

La guitarra, sostén del tiempo con bella y penetrante música va marcando las pautas, para que nada se desplace o mueva de los ocho tiempos de cada compás binario que como los “tangos” tienen los “tientos”.

El cante, como brasa interna, volcán de lava; en sordo quejío a la bailaora llama, provocando ardores en el corazón que ama.
Como tantos otros cantes de los que muy bien se hacen en Extremadura, los “tientos extremeños” se distinguen por los giros melódicos y peculiar acento de los cantaores de esta flamenca región.


15. Jaleo por tangos extremeños
Nace el “tango-jaleo extremeño”, de la fusión de dos estilos que por si mismo cada uno tiene muy reconocido sello en la región extremeña. Sin embargo, con la unión de estos se ha logrado un nuevo cante muy atractivo con buen ritmo bailable, sin por ello perder su arte y flamencura.

Una bien notoria peculiaridad del “tango-jaleo extremeño” es la de que por separado el “jaleo” se ejecuta sobre la base musical de la combinación rítmica binario-ternaria de la bulería (compás de 12 tiempos), mientras que como “tango-jaleo” se atiene al compás binario de 8 tiempos de los tangos.


16. Tango-rumba extremeña
Largo es el recorrido de los “tangos” en su dilatada historia. Considerados como uno de los cuatro ritmos básicos del flamenco, han engendrado numerosos estilos que llevan ligado a su nombre el marchamo de la localidad o persona creadora.

Por otro lado, en el compás binario de los “tangos” han surgido y surgen otras modalidades o adaptaciones flamencas, que o bien procedentes del folklore de otras regiones de España a su base rítmica ajustaron reconocidos maestros de nuestro cante: el garrotín asturiano, la farruca gallega, etc., o dentro de la propia geografía flamenca, otras expresiones folklóricas fueron conquistadas por su alegre compás.
El “tango-rumba extremeña” es una creación personal de Felipe Lara. El aire de rumba lejos de quitarle sabor flamenco al tango, le aporta la frescura de lo nuevo, de lo distinto. En suma, contribuye a agrandar el abanico multicolor de estilos de nuestro cante.

17. Tangos del alba de Felipe Lara
Con los “tangos” pasa lo mismo que con las “bulerías”, son de fácil adaptación a cualquier melodía o expresión poética. Los “tangos del alba” de Felipe Lara a modo de romance cuentan una romántica historia de amor, que en todo momento discurre por los alegres cauces de la felicidad compartida.

Como estilo literario-musical goza de todos los positivos ingredientes para ser candidato al reconocimiento por parte de los aficionados del flamenco, como un bello cante de extensión. Lo de “tangos del alba” tiene doble lectura. Por un lado porque literalmente el romance que cuenta su poética tiene al alba su feliz culminación. Por otro, porque todo nacimiento




 
Esta casa huele a gloria,
 Dios mío quién vive aquí; 
aquí vive una gitana, 
que está loquita por mí

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